Cuando estamos en busca de una tarjeta de crédito es posible que nos ofrezcan una tarjeta de servicios pero, cuál es la diferencia con un plástico tradicional.
¿Qué es una tarjeta de crédito?
En palabras simples, una tarjeta de crédito es un plástico que te ofrece un banco, tienda departamental o fintech el cual establece un límite de crédito y te da la opción de comprar a cambio de pagar el total o abono mínimo a final de mes.
De esta manera, una tarjeta de crédito también brinda meses sin intereses y beneficios como puntos o cashback por todas tus compras.
¿Qué es una tarjeta de servicios?
Por su parte, una tarjeta de servicios es un plástico que no fija un límite de crédito, por lo que te permite comprar lo que necesitas sin importar el precio del producto. Sin embargo, debes de liquidar el total de tu cuenta a final de mes.
Esta tarjeta suele destinarse para las compras de despensa en supermercados ya que siempre se destina un monto fijo de gastos, así como el pago de servicios como internet, telefonía, luz, entre otros.
Diferencias entre tarjeta de servicios y crédito
Entre las principales diferencias de una tarjeta de servicios y una de crédito es el límite disponible, pues la tarjeta de servicios no tiene un gasto predefinido, mientras la tarjeta de crédito lo fija según tu comportamiento en Buró e ingresos que percibes.
La forma de pago, en una tarjeta de crédito puedes pagar una cantidad mínima de todas tus compras, mientras una tarjeta de servicios es necesario liquidar el total de tus compras.
Otra diferencia son las comisiones, una tarjeta de crédito puede no cobrar anualidad, mientras una tarjeta de servicio suele ascender los $3 mil pesos anuales por usarla.
Beneficios exclusivos, una tarjeta de servicios puede bonificarse con puntos o cashback extra, mientras una tarjeta de crédito puede darte acceso exclusivo a salas VIP en aeropuertos y conciertos.
¿Cuál tarjeta me conviene elegir?
Aunque parezca complicado, elegir entre una tarjeta de crédito y una de servicios es más sencillo de lo que parece. Primero, define cuál será el uso que le darás al plástico.
Si tu sólo quieres pagar el súper, teléfono, internet o cualquier gasto recurrente personal o de tu hogar, una tarjeta de servicios es la mejor.
Ahora, si no quieres pagar una anualidad alta y prefieres abonar el mínimo o el total de tus compras a final de mes “sin una obligación”, una tarjeta de crédito será lo mejor para tí.
Finalmente, recuerda que una tarjeta de servicios puede ayudarte a ser disciplinado en tus compras. Aunque existen pocas financieras que lo ofrecen como es American Express, otra posible opción será Hey Banco quien contempla un producto que competirá con AMEX.
Ahora que sabes las diferencias entre una tarjeta de servicios y una de crédito, cuéntanos si te animarías a solicitarla y no olvides seguirnos en nuestras redes sociales.
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